Clima astral de Junio: Imagine

 

Hola chichis!!! Estaba deseando que llegara el mes de junio, porque después del revulsivo de mayo necesitábamos ya una temporadita más o menos tranquila. Cuando miro el clima astral de junio, no puedo evitar pensar que este será un mes de cierta recuperación. 

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Habrá picos más o menos constructivos y visionarios, pero con varios planetas entrando retrógrados, lo que nos invita también a mirar atrás, a integrar, procesar y recuperar motivos, fuerzas y cierta calma. Además, como sucede todos los años por estas fechas, se avecina ya el solsticio de Cáncer y la Noche de San Juan, en un clima bastante intuitivo. ¡Un mes, por fin, sin muchos trompicones! 

Mercurio en Tauro, directo por fin

Empezamos el mes después de la amistosa Luna Nueva en Géminis, que marcó la salida de la temporada de eclipses con una atmósfera estimulante y abierta, de modo que el mes inicia con dos rasgos característicos: la Luna creciente, devolviéndonos poco a poco un agradecido latir de energía, y Mercurio estacionario. 

Del 1 al 6 de junio tendremos aún a Mercurio estacionario, es decir, aparentemente detenido en el 26º de Tauro. Y eso puede traer consigo algunas retenciones, retrasos o pequeñas esperas en asuntos mercuriales, como notificaciones, mensajería, compras esenciales que tardan un poco más de la cuenta en resolverse, postergaciones de asuntos intelectuales o una sutil dificultad para dinamizar pequeños asuntos de carácter práctico.

Además, esos días tendremos a Mercurio en cuadratura a Saturno y en séxtil a Neptuno, así que podemos sentir que luchamos contra los elementos para que las tareas pendientes se ajusten a los tiempos o a las formas. Puede que nos sintamos especialmente presionadas a ponernos manos a la obra en asuntos profesionales, o que en nuestros encuentros sociales asumamos alguna responsabilidad o algún compromiso algo agridulce. 

Sin embargo, si estáis trabajando en algo que os ilusiona, o si estáis valorando algún plan, esa primera semana de junio podría ser especialmente favorable para ultimarlo, reorganizando y planificando mejor los pasos que podemos seguir de aquí en adelante para llevarlo a la realidad. 

Si os interesan asuntos literarios o artísticos, pueden ser días excelentes para materializar algo sensible o inspirador, también. Además, tendemos a intercambiar ayuda con personas cercanas, de forma más bien solícita y solidaria, pero muy conscientes de cuáles son los límites realistas para que eso no nos desgaste.

En ese panorama, el día 3 de junio Mercurio entrará por fin directo en el 26º de Tauro, aunque aún permanecerá estacionario hasta el día 6. 

A partir de ahí Mercurio volverá a recorrer, poco a poco, la misma zona del zodíaco que recorrió durante su retrogradación, de modo que hasta el 18 de junio permanecerá en sombra post-retrógrada, dándonos la oportunidad de definir o esclarecer asuntos que nos hayan estado ocupando desde finales de abril.

Saturno retrógrado en Acuario

En medio de esta atmósfera, el 4 de junio también sucede algo importante: Saturno entra retrógrado en el 25º de Acuario, iniciando una nueva fase más retrospectiva y reflexiva que durará hasta que este planeta vuelva a estar directo, el 23 de octubre. 

Saturno retrógrado en Acuario puede afectar especialmente a asuntos colectivos, institucionales, políticos o legislativos, abriendo la oportunidad de detener un poco el ritmo para revisar las medidas, regulaciones y objetivos que se hayan estado trabajando desde el pasado 11 de octubre. 

También podríamos encontrar reestructuraciones a nivel de proyectos, colaboraciones o asuntos profesionales. Por ejemplo, si teníamos un proyecto a medias o un plan que veníamos postergando desde hacía mucho, ahora podríamos estar más dispuestas a regresar a eso para finiquitarlo.

Y si algo nos había parecido excesivamente exigente o restrictivo a la hora de relacionarnos con nuestro contexto, tal vez se suavice un poco. Al fin y al cabo, Saturno rige la legitimidad, la responsabilidad o el sentimiento de obligación, y estando retrógrado podríamos aprovechar para redireccionar todo eso hacia un ritmo más humano, en el que podamos hacernos cargo, pero sin tanta presión. 

De hecho, a nivel personal, si alguna responsabilidad nos ha hecho sentir enajenadas o estresadas, con la entrada de Saturno retro podríamos reorganizarnos de una forma realista, reconociendo cuáles son nuestras limitaciones y prioridades. 

Con todo, ahora podríamos pasar de la expectativa de producir y avanzar todo el rato, a detenernos para dedicar tiempo y esfuerzo a los cabos sueltos que fueron quedando atrás. 

Tal vez cuestionando la idea de progreso constante para asentarnos en un lugar más amistoso con el descanso y los tiempos humanos. 

La segunda semana de junio

La segunda semana de junio está marcada por dos aspectos. En primer lugar, tendremos a Mercurio, ya directo, haciendo un tercer y último trígono a Plutón, lo que nos puede llevar a una atmósfera de resultados y descubrimientos en relación a cuestiones que nos hubieran parecido más bien misteriosas o perturbadoras los últimos días de abril y los últimos días de mayo. 

Si en aquellas fechas albergábamos temores o inseguridades, si nos habíamos concentrado en alguna reflexión persistente y central, si iniciamos un proceso de introspección, o si habíamos tratado de poner orden en asuntos económicos o prácticos, ya podríamos, por fin, dotar de claridad a todo eso y pasar a otra cosa. Además, de nuevo, podremos gozar de muchísima focalización para el estudio, la escritura y la comunicación, o aplicar una gran estrategia para negociar con otras personas asuntos delicados.

Mientras tanto, Venus hace ya una conjunción a Urano, que se sentirá especialmente fuerte el fin de semana del 11 y 12 de junio. Lo interesante de esto es que Venus está muy fuerte en Tauro, su propio signo, y se une a Urano con el Nodo Norte muy cerquita. Algún tema contextual puede sacudir nuevamente alguna cuestión que querríamos ver estable, haciendo que se tambalee, tal vez, algo que hasta el momento había sido una fuente de seguridad. 

Podría haber, una vez más, debates sobre el cuerpo de las mujeres, o expresiones sociales orientadas a la autogestión de comunidades o la soberanía alimentaria.

Particularmente, creo que los precios de la electricidad o la energía pueden volver a salir en las noticias, así como temas relacionados con el abastecimiento de alimentos, suministros y componentes electrónicos, por poner algunos ejemplos. Sin embargo, este tránsito es rápido, así que no creo que llegue la sangre al río, como se suele decir. Pero sí podrían ser días bastante esclarecedores, con los que comprender en qué punto estamos desde una nueva perspectiva.

Además, a nivel personal, esta conjunción de Venus y Urano podría traer sorpresas por parte de amistades o personas queridas, o, por qué no, alentar la emergencia repentina de algo que parece amable y disfrutón, pero termina despertando también cierta excitación que irrumpe con lo acostumbrado o reclama agilidad de respuesta. Una cosa está clara, y es que esos días del 11 y 12 de junio necesitaremos espacio y tiempo para todo eso que nos haga sentir interesadas, libres, autónomas o diferentes.

Tercera semana de junio

La tercera semana de junio coincide con la Luna Llena, que se dará en Sagitario el día 14, así que viene a ser la semana más movida y ajetreada del mes. ¡Las energías serán muy altas! Además, solo un día antes de la Luna Llena, el 13 de junio, Mercurio ya ingresa de nuevo en su propio signo, Géminis, y unos días después, el 18 de junio, sale ya de su sombra post-retrógrada, para actuar con normalidad: lo que trae un gran dinamismo mental, mucho deseo de entrar en movimiento o salir a hacer diez mil cosas al día.

Mientras este clima chispeante se desenvuelve, el Sol dibujará un trígono a Saturno y una cuadratura a Neptuno. Estos aspectos se sentirán toda la semana, pero muy especialmente estarán activos entre el 15 y el 17 de junio. Puede que estemos cosechando ciertos logros y resultados prácticos en algún proyecto personal que hayamos estado trabajando desde los inicios de febrero. O que, por fin, una situación que entonces se sentía muy limitante o incierta alcance un punto de estabilidad bastante agradecido. 

Mientras tanto, si esta semana hemos logrado encontrar estabilidad o paz en algo que nos hubiera parecido muy presionante solo unos meses atrás, también buscaremos expandirnos, crecer y mirar a otros horizontees. Así que no me extrañaría nada que muchas personas sintieran esos días que alguna decisión está ya tomada, o que se estén planteando emprender el camino hacia algún sueño inspirador que llevara a la espera desde marzo.

Al fin y al cabo, esa semana estamos inmersas en la atmósfera de la Luna Llena en Sagitario, así que, en corto, estaríamos tomando conciencia de dónde estamos ubicadas en la vida, aspirando a abrirnos para crecer más allá. 

Una semana muy productiva, y simultáneamente idealista, en la que las ilusiones conversan con lo realizable.

Por último, el fin de semana del 18 y el 19 de junio está bastante cargado de aspectos. Tenemos, por un lado, a Venus dibujando una cuadratura a Saturno, lo que podría traer sentimientos de soledad, o frustraciones asociadas a carencias prácticas y renuncias a cosas que nos gustan porque no tengamos tiempo. Pero, visto de otro modo, podríamos aprovechar esta cuadratura de Venus y Saturno para delimitar qué es esencial y qué no, y focalizar fuerzas. 

También tendremos, simultáneamente, a Venus haciendo un séxtil a Neptuno y un trígono a Plutón, y a Mercurio en séxtil a Júpiter. Aspectos que refuerzan el carácter visionario, esperazador o transformador de esa semana, que pueden ayudarnos a tomar conciencia de nuestra hoja de ruta, o infundir en nosotras ciertas esperanzas de mejoría y resiliencia. 

Sería un finde excelente para hacer compras que hubiéramos postergado durante la retrogradación de Mercurio, cerrar contratos o hacernos cargo de compromisos que requieran de cierta visión. ¡Solo tengamos en cuenta que es importante no prometer más de lo que podemos dar! 

El solsticio y la noche de brujas

La cuarta semana del mes viene ligerita de aspectos, pero en ella tiene lugar uno de los eventos astrológicos más legendarios: el solsticio del 21 de junio. Es decir, la entrada del Sol en Cáncer, lo que marca siempre el comienzo de la nueva estación: verano o invierno, dependiendo del Hemisferio en el que viváis.

Además, en este caso el Solsticio coincidirá con la Luna en Cuarto Menguante, pasando también de Piscis a Aries. Creo que esto trae un colosal pasar página. Tal vez sintamos que dejamos atrás dudas, laberintos e inseguridades, para impulsarnos hacia eso que sentimos necesario y deseado.

Este paso simultáneo de la Luna y el Sol a signos cardinales se puede sentir como que dejamos atrás un largo y denso período de transición y adaptación para desencadenar algo decisivo. 

Tal vez sintamos que por fin llega el momento de tomar la iniciativa para crecer y satisfacer nuestras necesidades interiores. ¿Qué necesitamos para sentirnos a gusto? Ahora toca atender a nuestras necesidades y a las necesidades de quienes amamos, nutriendo aquello de lo que nos sentimos parte y corazón.

Además, solo dos días después del solsticio, el día 23, tendremos una brujil Luna Balsámica en Tauro para celebrar la Noche de San Juan, mientras Venus ingresa en Géminis. El encuentro, el conjuro, el gesto o el ritual típico de esas fiestas puede resultar increíblemente disfrutón, incluso con un toque lúdico y amistoso. La noche invita, desde luego, a preparar algo con amistades. 

Más allá de eso, Venus en Géminis abre, hasta el 18 de julio, un período muy bonito para trabar relaciones sociales amistosas y agradables, o para diversificar un poco nuestras fuentes de disfrute. Podría apetecernos, más que de costumbre, apuntarnos a clases de baile, leer cosas entretenidas, hacer visitas cortas o salir a la calle para explorar nuevas formas de ocio. Hay algo saltarín y alegre con este Venus que puede traernos todo un soplo de aire fresco a final de mes.

Los últimos días de junio

Precisamente, los últimos días de junio vienen algo más ajetreados. De hecho, los días 27 y 28 tendremos a Marte en Aries dibujando un séxtil a Saturno, genial para retomar algo de disciplina a nivel de ejercicio y deporte, o para poner energía en la consecución de algún propósito, tocando a alguna puerta o tomando decisiones de cara al largo plazo.

El 28 y 29 de junio tendremos a Júpiter en Aries muy activo, recibiendo una cuadratura del Sol y un séxtil de Venus, de modo que puede renovarse nuestra confianza en algún propósito expansivo que nos saque de casa, o que nos saque de lo conocido, para abrirnos más allá de la rutina habitual y explorar posibilidades. 

Esos días tendemos a ser algo exageradas en nuestras reacciones emocionales, y podríamos dedicar bastante energía a mover los vínculos que tengamos con ciertas personas o espacios. 

Además, Neptuno entrará retrógrado en el 25º de Piscis justamente el día 28, un día antes de la Luna Nueva en Cáncer, que sucederá el día 29. La sensibilidad estará, nuevamente, a flor de piel. Podría haber asuntos relacionados con el agua, estancamientos o inundaciones, tan típicas de Neptuno estacionario. 

Pero teniendo en cuenta los aspectos que circundan a esta lunación, también podríamos aprovechar para hacer algún viaje corto, alguna excursión al mar o al río, o tomar unos días libres para mirar hacia dentro y reconocer qué deseamos verdaderamente, expresando o poniendo en práctica nuevas intenciones y deseos. También podríamos aprovechar para dormir como un bebé. 

Finalmente, el último día del mes, el 30 de junio, tendrá lugar una cuadratura exacta entre Marte y Plutón, lo que nos lleva de nuevo a reaccionar activamente o a empujar adelante alguna situación que nos haya venido conflictuando desde el inicio de marzo. Esta cuadratura de Marte y Plutón puede ser bastante incendiaria, revelando choques de voluntades o desencadenando expresiones explícitas de atracción y rechazo. 

Podría resultar en acciones o decisiones precipitadas, impulsivas, o en un deseo de cortar por lo sano con algo que nos haya venido quemando, intimidando o asustando últimamente. Podría traer, también, alguna que otra demostración de fuerza que cambie nuestra lectura de las cosas o que auspicie alguna metamorfosis en la manera en que nos posicionamos frente a asuntos que podamos considerar abusivos. 

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Como veis, un mes que trae un carácter propio, pero dejando un margen amplio a que podamos gestionar su movimiento desde un lugar decido. 

¡Feliz mes! Un abrazo grande!!!

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