Hola chichis!!! La noche del 6 al 7 de septiembre tendremos una de las Lunas Nuevas más amables del año, que sucederá en el grado 14 de Virgo, en trígono exacto a Urano, y en un clima astral cargado de aspectos interesantes.
Además, es destacable que tenemos a todos los planetas sociales y transpersonales retrógrados, y a la mitad de planetas en signos de Tierra. Esto de por sí apunta a un momento sumamente integrador, en el que podemos por fin hacernos cargo, con lucidez y claridad, de toda una serie de pormenores prácticos con los que mejorar nuestras condiciones de vida en el día a día. ¡Lo que iniciemos ahora viene a resolver temas de fondo que pueden tener importancia más adelante!
Sembrando nuevas realidades
Si habíamos deseado tomar medidas para estabilizar o solventar nuestros desafíos, en esta ocasión tendremos la oportunidad de hacerlo, a diversas escalas.
Por un lado, con esta lunación en Virgo podemos avanzar sustancialmente en todo lo que requiera de perfilar detalles o tomar decisiones modestas y satisfactorias que contribuyan a nuestro avance. Por otro, es posible que tengamos más facilidad para contemplar el amplio panorama y definir con ello planes de acción que miran lejos.
De por sí, la Luna Nueva es la fase lunar que más nos invita a mirar hacia dentro para descubrir qué necesitamos desencadenar para crecer y encontrar bienestar. Los novilunios son siempre momentos semilla, en los que la sensibilidad nos inclina a comenzar algún proceso que podamos desarrollar los siguientes meses.
Ahora sería buena idea plantearnos qué medidas y responsabilidades podemos y queremos asumir como prioritarias en los próximos seis meses.
En la próxima Luna Llena en Virgo, de hecho, que sucederá el próximo 18 de marzo, podremos recoger los frutos de todo lo que iniciemos ahora. Así que, ¿qué dirección queremos dar a nuestros pasos? Esta ocasión invita con fuerza a asentar intenciones de Luna Nueva, porque verdaderamente favorece que concretemos realidades con extraordinaria precisión.
¿Qué pone sobre la mesa una lunación en Virgo?
Ya que Virgo se relaciona con los hábitos, rutinas y tareas diarias, puede ser un momento excelente para dejar atrás costumbres que nos debiliten, y tomar el control en todas esas cosas que solemos ver como peccata minuta, y que sin embargo pueden llegar a estresarnos bastante mientras quedan en la lista de pendientes.
Por ejemplo, es un gran momento para resolver burocracia y papeleo, para poner en orden nuestros espacios y revisar nuestras dinámicas de sueño o alimentación. Si queréis dejar de fumar, o abandonar otras costumbres que no nos hacen bien, ¡es el momento!
Además, ya que Virgo habla de integrar conocimientos y habilidades que nos hagan sentir más preparadas ante lo que surja, todo lo que iniciemos ahora con miras a perfeccionar nuestras capacidades puede resultar fructífero. Es una lunación ideal para comenzar estudios especializados, actualizar cómo nos relacionamos con el trabajo y la productividad, o hacer algo para contribuir a la armonía en la atmósfera laboral.
La pregunta sería: ¿qué necesito perfeccionar o reorganizar en mi entorno o en mi agenda diaria para hacer mi día a día más amable?
Este momento también invita a solventar conflictos de convivencia, de gestión de tiempo o de cuidados. ¿La responsabilidad común es compartida de forma justa? ¿Quién dedica más tiempo a sacar las castañas del fuego con las tareas cotidianas?
Además, si necesitamos apoyo en alguna cosa, o si sentimos que hay alguien importante en nuestra vida que lo necesita, esta lunación favorece que podamos articular mejor nuestra red de soporte mutuo. A otra escala, también puede ser ideal para hacer revivir a nuestras plantas y dedicar atención a nuestras amigas animales, otros temas muy virginianos.
Vamos a analizar el clima astral del momento, porque es espectacular.
Gran trígono de Tierra
Con el peso de las luminarias y Marte en Virgo, podríamos decir que se forma un gran trígono de Tierra muy bienvenido, que da un carácter particularmente fluido a todo lo relacionado con este elemento. Aunque Urano y Plutón no están, como tal, dibujando aún ningún aspecto, si aplicáramos orbes algo más abiertos sí podríamos considerarlo.
Con todo ello, Plutón en Capricornio, Urano en Tauro y los planetas en Virgo suman a la mitad de los planetas en el elemento Tierra, y eso abre la oportunidad de relacionarnos con maestría y facilidad con la gestión práctica de nuestra vida. Al fin y al cabo, un gran trígono es siempre una figura de aspectos astrológicos sumamente fluida.
Temas como la seguridad, la estabilidad, la gestión de tiempos, espacios y recursos pueden recibir un empujón positivo al albor de esta atmósfera tan especial.
También podremos aminorar la marcha con la presión o la autoexigencia, y ser más eficaces y resolutivas, superando bloqueos, miedos y evasiones para hacernos cargo de lo fundamental. También gozaremos de una mejor focalización para retomar el control en lo que hayamos sentido inestable estos últimos meses. Así que, si lo pensamos, ¿qué está ya en nuestra mano para mejorar nuestras perspectivas a futuro?
Amistarnos con Urano
Llevamos todo el año inmersas en un clima inestable, sobre todo debido a los terremotos que Urano en Tauro ha introducido en lo que creíamos sólido. En otras palabras, lo que antes nos daba seguridad y estabilidad se ha estado sintiendo precario, y eso ha traído consigo mucho estrés e incertidumbre, pero también nuevas ideas, experimentos, y valor para ir más allá de la costumbre.
Este mes Saturno y Urano han aflojado sustancialmente su cuadratura, estando ya a 7 grados de distancia. ¡La desafiante sensación de inestabilidad que llevamos arrastrando todo el año puede aflojar un poco! Y eso nos permite descubrir de forma más relajada nuestras posibilidades. Al fin y al cabo, cuando estamos estresadas es difícil pensar.
Con el Sol y la Luna en trígono exacto a Urano, es posible que ahora decidamos apostar por introducir cambios innovadores en nuestro mundo práctico, confiando más en lo que estamos por construir que en lo que ya conocemos bien.
Este es el fin del lamento por lo que fue, al menos en algún área de la vida. Es el momento en que abrazamos alguna cosa nueva que demanda trabajo y dedicación, pero que ahora podemos encontrar más estimulante y prometedora a largo plazo.
Nuestras aspiraciones de mejorar nuestras circunstancias pueden empezar a concretarse a partir de aquí, contribuyendo a que nos sintamos más realizadas y seguras.
Este trígono exacto de la Luna Nueva a Urano también favorece que organicemos de forma excelente nuestros proyectos y visiones a futuro, o que incluso podamos dar un empujón positivo a todo lo que involucre colaboraciones, amistades y grupos de personas.
Claro que Urano también introduce en la atmósfera un rasgo muy independiente y autónomo. Y si encontramos que hay dinámicas demasiado estrechas en algún entorno cotidiano, ahora tenderemos a saltar ágilmente a un lugar en el que el pasto esté más verde.
A un nivel más concreto, este trígono también puede venir que ni pintado para actualizar cómo nos relacionamos con la tecnología en el día a día, o incluso favorecer cualquier plan de actualizarnos digitalmente en el trabajo.
¿Cuánto tiempo diario dedicamos a las redes sociales o al intercambio de información? ¿Nuestros conocimientos están al día?
Por otro lado, este es un momento especialmente interesante para observar con un punto de vista crítico lo que ocurre en nuestro contexto, extrayendo a partir de ahí ideas esclarecedoras sobre los pasos que nos conviene dar para ubicarnos mejor en la realidad de ahí fuera. ¿Cuál es el futuro de lo que hacemos? ¿Necesitamos innovar para transformar nuestra actividad laboral?
El juego de Marte
Marte en Virgo hace una conjunción amplia a las luminarias, y esto ya nos da una idea del carácter valiente y echado para adelante de este momento. Como planeta de la acción y la iniciativa, Marte da a las intenciones de Luna Nueva que asentemos ahora un carácter muy decidido, autónomo, afirmativo, e incluso asertivo.
Marte agiliza nuestras iniciativas, y nos hace reaccionar con rapidez y eficiencia. Favorece que apliquemos lo aprendido, en forma de soluciones.
Puede que ahora también podamos descubrir qué es eso que hacemos mejor que nadie, o que por lo menos nos sintamos motivadas y confiadas ante nuestra propia destreza a la hora de solventar algún asunto. ¡Es tiempo de aplicarnos con eficacia!
Por otro lado, Marte en Virgo nos pregunta qué frentes merecen nuestra energía, tiempo y dedicación, y cuáles no. En Virgo, Marte viene a enseñarnos a gestionar muy bien nuestra energía, organizando nuestro plan de acción de forma coherente. Si, por ejemplo, los últimos meses hemos estado probando diferentes alternativas o proyectos, Marte en Virgo tocando a las luminarias nos dice que es el momento de escoger nuestro campo y focalizar ahí nuestro afán de concreción, materialización y superación.
El desafío que puede venir con esto, naturalmente, es que pueda haber un tono algo competitivo en la atmósfera. O que queramos hacer las cosas tan perfectas que podamos sentirnos intimidadas a la hora de tomar la acción. Si es así, Marte en Virgo también puede hablar de conflictos con el trabajo que se hayan estado formando las últimas semanas.
¿Qué podemos hacer para colaborar en lugar de competir? ¿Cómo hablar claro para zanjar disputas estresantes? ¿Cómo confiar en nuestras propias habilidades para lanzarnos?
Mercurio en Libra
Y aquí es donde entra en juego Mercurio, el planeta regente de esta lunación. Mercurio en Libra introduce en el panorama sensibilidad e inteligencia social suficiente como para sortear cualquier desafío y lograr un entendimiento que abogue por el bien común, la igualdad, la justicia o la paz. También pone nuestra reflexión y nuestras ideas al servicio de la armonía y el balance.
Por un lado, si teníamos cualquier conflicto interpersonal, ya fuera a nivel afectivo o laboral, Mercurio en Libra lima las asperezas con sabiduría, gracias a sus dotes diplomáticas, respetuosas y dialogantes.
De hecho, Mercurio en Libra favorece que encontremos las palabras, ideas e intenciones que más favorezcan al equilibrio, pero también nos invita a escuchar activamente lo que otras personas, o el entorno, tienen para decir. Así que el momento invita fuertemente a hacer las paces, a intercambiar consejos o a charlar amistosamente con quienes puedan ayudarnos.
Con Mercurio en Libra rigiendo a esta lunación también hay un foco importante en la construcción de paz a nivel mental.
Tal vez tomar cartas en nuestros desafíos y empezar a actuar de forma resolutiva, que es lo que esta lunación trae a colación en primer lugar, se sienta como un remanso de paz a nivel mental. Ocuparnos, en vez de preocuparnos, puede ser una importante fuente de bienestar.
Además, Mercurio hace un trígono a Saturno: un aspecto muy amable que incentiva nuestra capacidad de focalización mental, nuestra paciencia y nuestra buena disposición a llevar las ideas a la realidad, o a conducir las relaciones hacia un compromiso equilibrado en el que se construye equidad.
Por si fuera poco, nuestra lectura de la realidad tiende a ser prudente y objetiva, o incluso metódica. Así que las soluciones e iniciativas que encontremos ahora pueden derivar en decisiones importantes, fundamentales, de las que aspiran a ser duraderas.
Resolver lo pendiente
Neptuno en Piscis se encuentra justo en frente de esta Luna Nueva, y muy especialmente ha estado activando por oposición a Marte los últimos días. Esto puede haberse sentido la pasada semana como un clima algo más cansado, evasivo o confuso de lo habitual, con momentos de gran fascinación por algo que rebasaba los bordes de lo cotidiano, introduciendo algún rasgo inspirador o empático en lo que estábamos haciendo.
Pero a pesar de que los altibajos neptunianos se hayan podido sentir laberínticos, en el momento de esta Luna Nueva sobre todo tendremos la oportunidad de extraer significado de lo que hayamos estado cavilando, organizando ideas, analizando flujos emocionales y concretando certezas y soluciones ante todo lo que hubiéramos dejado flotando en el limbo personal de lo pendiente.
Visto así, Neptuno en oposición a los planetas en Virgo representaría a esa enorme nebulosa de asuntos que tenemos por delante resolver. ¿Cómo hilvanar fino para ordenar esa nube indefinida?
¿Cómo desenredar el ovillo para entender de dónde nacen la confusión y la postergación? ¿Qué nos dice el cansancio de nuestra forma de vida?
Además, puesto que Neptuno también se relaciona con adicciones y dependencias, esta Luna Nueva en oposición a Neptuno es, como os decía antes, el momento ideal para dejar de fumar, regular las horas de sueño, balancear momentos de trabajo y momentos de descanso, o tratar de balancear de algún modo las dinámicas de dependencia emocional. Lo miremos por donde lo miremos, esta Luna Nueva en Virgo nos ayuda a organizar nuestra vida de forma más saludable, con pequeñas revoluciones que ya está en nuestra mano llevar a cabo.
Gran poder de voluntad y determinación
Otro tema a destacar de esta lunación es el trígono exacto de Plutón y Marte. Nuestros deseos personales conversan amistosamente con nuestra voluntad más profunda. Nuestras acciones nacen de motivaciones genuinas. Nuestro poder de voluntad es altísimo en este momento, y nos llama a hacer cambios prácticos de primer orden, poniendo en ello muchísimo empeño.
Si ya tenemos claro qué deseamos, hacerlo en esta Luna Nueva puede ser buena idea, porque favorece que perseveremos contra viento y marea hasta materializarlo.
Además, si recordáis, este trígono de Marte y Plutón está en diálogo con una serie de circunstancias, iniciativas y voluntades que comenzaron a formarse a finales de marzo del 2020. ¿Cómo hemos madurado desde entonces? ¿Cómo fructifican ahora los esfuerzos que iniciamos en aquellas fechas? Al menos en algún ámbito de la vida, es muy posible que en este momento estemos orgullosas de la resiliencia y la experiencia que hemos trabajado en este tiempo. ¡Y ahora nos sentimos plenamente capaces, o poderosas, de sacar adelante algo que vaya más allá!
Venus y Júpiter: el entusiasmo
Por último, tenemos a Venus en Libra, muy fuerte, formando aspectos casi exactos a Júpiter y a Plutón. El trígono de Venus y Júpiter favorece el desarrollo de amistades, relaciones y equipos de personas, y engrasa nuestros proyectos, ideas y filosofías de vida con grandes dosis de entusiasmo, confianza y pasión.
En este sentido, Venus y Júpiter en trígono están creando la atmósfera ideal para disfrutar a lo grande de algo que amamos.
También da cierta predisposición a prometer más de la cuenta cuando se trata de llegar a acuerdos con otras personas. Pero más allá de eso, habla sobre todo de grandes expectativas depositadas en las relaciones sociales, los proyectos o los planes a futuro. Así como grandes expectativas de liberarnos por fin de alguna pesada carga.
Hay amigas ahí fuera
Por otro lado, tenemos a Venus formando, también, una cuadratura a Plutón. Esta cuadratura es bastante abrasiva en temas de pareja. Enfocada desde la calma, esta cuadratura nos permitirá transformar las dinámicas en nuestras relaciones, o incluso identificar cualquier situación en la que nos hayamos podido sentir subalternas, o tratadas injustamente, para precisamente tomar cartas en el asunto.
En definitiva, vamos a tener sensibilidad para detectar cualquier posible relación de poder en nuestra atmósfera, y si sentimos que hay algo quemante o abusivo a nuestro alrededor, tendremos ganas de poner en orden las cosas de una forma mucho más independiente.
Sea como sea, en esta lunación no vamos a aceptar más la ambigüedad hiriente de algunas situaciones. En esta lunación nos hacemos cargo.
Por otro lado, yo diría que con este clima astral, si nos hemos sentido encerradas en una atmósfera amenazante, hay algo que está claro, y es que no todas las revoluciones personales las tenemos que hacer solas. En este momento, con Venus en trígono a Júpiter, si sentimos que en casa o en el trabajo hay abusos, podemos contar con hacer piña con amigas, asociaciones o compañeras.
¿Cómo aprovechar esta Luna Nueva en Virgo?
Siempre es interesante ver en qué zona de nuestra carta natal caen las lunaciones, porque eso nos ayuda a entender de forma más concreta qué mueven a nivel particular en nuestra vida. Pero esta vez, ¡la recomendación es más enfática! La casa de nuestra carta en la que cae el grado 14 de Virgo es el escenario de experiencias en el que podremos arreglar las cosas de una forma muy práctica y visible.
Además, también estaría muy bien analizar cuál es la zona en la que cae el grado 14 de Tauro, donde se encuentra Urano, porque esa área de nuestra carta también tendrá mucho que decir en los procesos que estemos por desencadenar ahora.
Por último, siendo una lunación en Virgo, naturalmente si tenéis planetas personales o cúspides a la mitad de los signos mutables, sentiréis más esta influencia. También puede ser una Luna especialmente favorecedora para quienes tengáis abundancia de planetas en signos de Tierra y Agua.
Ojalá este momento sea provechoso para vosotras!
Un abrazo grande, chichis!!!
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