Hola chichis!!! Empezamos octubre con Luna Menguante y 6 de 10 planetas retrógrados, lo que invita a interiorizar las cosas y a disminuir la marcha. Sin embargo, lo que caracteriza a este mes es que, a medida que varios planetas vayan entrando directos, nos iremos adentrando poco a poco en otra de las etapas más activas del año, que se desarrollará con especial fuerza en noviembre y diciembre, con la última temporada de eclipses del año.
De este modo, podríamos pensar en octubre como un mes de transición, en el que tendremos la oportunidad de repensar, comprender y ubicar las cosas, con una creciente sensación de que las cosas se mueven y transforman, muy especialmente pasada la primera mitad del mes. Vamos a ver con detenimiento lo que nos trae la danza de los astros en octubre.
Hacia la Luna Nueva en Libra
Octubre empieza con la Luna apagándose poco a poco, perfilando sus puntas hasta desaparecer por completo en la Luna Nueva del día 6. De ahí que los primeros días del mes busquemos más bien el sosiego y la calma balsámica del autocuidado, escuchando activamente qué nos pide nuestro interior.
Esos primeros días de octubre son, de hecho, geniales para analizar en profundidad nuestras rutinas, nuestras relaciones y nuestros deseos, porque vamos a tener una serie de aspectos de lo más psicológicos, que favorecen la adopción de cambios sutiles de hábitos y actitudes, con los que nutrir la serenidad y el bienestar.
Por un lado, tendremos a Mercurio retrógrado en Libra, formando de nuevo una cuadratura a Plutón y un trígono a Júpiter. Aspectos que ya hizo estando a mitad y finales de septiembre, y que volverá a repetir a comienzos de noviembre.
Un breve paréntesis mental, en el que podremos reflexionar de forma profunda e integradora en vivencias previas, y en los ecos que éstas traen a nuestro presente.
En consecuencia, es una oportunidad para afianzar el equilibrio de alguna situación, definiendo un sentido de dirección ante algo que nos haya resultado retante previamente.
Por otro lado, Venus estará esos días formando un gran séxtil con Plutón y Neptuno, y una cuadratura a Júpiter. Nuestra visión en todo lo que representa Venus se profundiza y abstrae, hallando el significado profundo de lo que amamos, por qué lo amamos, y por qué lo amamos así. También puede haber un desarrollo extraordinario de temas como inseguridades, vulnerabilidades y miedos en temas como el amor, la economía, la realización personal o la sexualidad.
Pero más allá de esa oportunidad de transformar las dinámicas con las que venimos viviendo todo eso, también gozaremos de un breve y expansivo momento de placer, en el que verdaderamente tendremos ganas de entregarnos a lo que nos apasiona. Visto así, es posible que las emociones mismas busquen serenarse a través de la expresión. ¡También serán días tremendamente creativos!
Luna Nueva y Plutón directo
La Luna Nueva sucederá en el 13º de Libra, el 6 de octubre, ¡y se dará en conjunción exacta a Marte, que también estará en el 13º. Además, justo el mismo día, Plutón entrará directo en el 24º de Capricornio. Y Venus, el regente de esta lunación, estará ya en el último grado de Escorpio, una zona de estrés. ¿Qué quiere decir todo esto?
Lo hablaremos con más profundidad más adelante, pero este será, ante todo, un momento de intensidad. Un punto de inflexión, tal vez, en alguna situación que hayamos deseado balancear durante cierto tiempo.
Hay que tener en cuenta que durante todo septiembre tuvimos un clima astral que inclinaba a trabajar las relaciones interpersonales. Y esta Luna Nueva puede marcar bien el final, bien una intensificación de ese proceso.
Con Plutón ya directo y Marte de por medio, puede ser un momento decisivo, en el que nazcan intenciones, deseos y voluntades muy fuertes, que pedirán cierto desempeño de energía.
Si tenéis muy ocupados los signos cardinales en vuestra carta astral, en octubre las cosas pueden pisar el acelerador en forma de realidades.
Por otro lado, obviamente la entrada de Plutón directo tendrá una resonancia a nivel colectivo. Pienso, por ejemplo, que Libra tiene que ver con la política, y Capricornio con Estados, fronteras, etc. Tal vez en este momento algo se reordene en el marco geopolítico o en los tratados de comercio. Con Plutón entrando directo, empezaremos poco a poco a ver despertar a los demás planetas retrógrados. Así que también, algo que aparezca alrededor de la Luna Nueva puede escalar durante el mes.
La fase de Luna Creciente
Tras la Luna Nueva, los ánimos vuelven a llenarse, mirándose en la Luna Creciente. De hecho, justo después de la Luna Nueva, el día 7, Venus entrará en Sagitario, invitándonos a ampliar las miras en todo lo que nos estuvo trayendo de cabeza a finales de septiembre y principios de octubre.
Algo puede sentirse más ligero y descongestionado, mientras que los deseos gestados en silencio tienden a explotar en forma de experiencia, de aventura, vitalidad, celebración. ¡Tendremos sed de volcarnos a vivir! Puede ser, también, un momento en el que extraigamos aprendizajes de alguna experiencia difícil de los días previos, tal vez valorando la sabiduría o la visión que nos dejó.
De hecho, poco después, el día 9, el Sol hará conjunción exacta a Mercurio retro, en el grado 16 de Libra. Ese será un momento idóneo para reflexionar y tomar conciencia de las dinámicas mentales que tuvimos recientemente, de las dudas y encrucijadas que han estado ocupándonos, y de lo que subyace tras ellas.
Puede ser un momento de serendipias, casualidades y respuestas, en el que repentinamente tengamos claridad sobre lo que deseamos hacer ante algún asunto.
Porque, además, Marte estará de por medio, casi en los mismos grados que Mercurio retro y el Sol. Toda esa segunda semana de octubre tendemos a estar dinámicas, a reaccionar rápido, y a decidir sobre la marcha, tal vez con algo de precipitación, hacia dónde focalizar nuestra energía.
En consecuencia, pueden ser días de cortes de situaciones, puntos de inflexión y comunicaciones que condicionen un poco las preguntas y las posibilidades que estemos barajando. Mensajes, charlas e ideas pueden ser un verdadero motor de acción esos días.
Saturno directo, aún en cuadratura a Urano
Tras todo ese movimiento, tenemos a Saturno entrando directo por fin el día 11, en el grado 6 de Acuario. Si veníamos trabajando pacientemente en algo desde el 23 de mayo, o si tuvimos que dejar algo importante a la espera, empezará a moverse a partir de este momento, de formas visibles y palpables.
Puesto que Saturno aún hace cuadratura a Urano, y este aún estará retro hasta enero del 2022, iniciamos una fase del año sumamente constructiva.
Ordenamos ideas, ocurrencias y proyectos, y empezamos a ver resultados concretos de todo lo que hemos tratado de cambiar o implementar en lo que llevamos de 2021.
A partir del 11 de octubre, con Saturno directo, es posible que empecemos a reconocer cuáles son los resultados concretos de alguna cosa que se haya sentido prioritaria durante el año. Tal vez también sea un momento favorable para dar estabilidad y definición a nuestros planes a futuro en base a la experiencia y las habilidades que adquirimos los últimos meses.
Los días anteriores a la Luna Llena en Aries
Precisamente, coincidiendo con el Cuarto Creciente, que se dará en Capricornio el día 13, empezarán a formarse los aspectos que definen el clima de toda la mitad de octubre. Por un lado, Venus hará un séxtil a Saturno que abre la oportunidad de estabilizar las cosas, apostar por algo seguro, o llevar a su materialización algún plan que nos entusiasma, en el que tal vez hallamos depositado grandes expectativas.
Y justo a mitad de mes, Venus también formará un séxtil a Mercurio retrógrado, que precisamente viene a abrir oportunidades de conciliar viejas tensiones, de esclarecer y dar dirección a las dudas de la primera mitad de octubre, y de aplicar lo aprendido hacia la consecución de algo valioso, disfrutón y alegre. Pueden ser días de mucha motivación.
Simultáneamente, el Sol formará un trígono a Júpiter y una cuadratura a Plutón del 14 al 18 de octubre. Aspectos que también formará Marte de forma idéntica entre el 18 y el 23 de octubre. Todo esto nos alienta precisamente a esclarecer conscientemente nuestras ideas y motivaciones, tal vez descubriendo algo que no habíamos tenido presente antes, que puede envalentonarnos sustancialmente para llevar a cabo algún plan.
Mientras se dan estos aspectos energizantes, creciendo hacia la Luna Llena, el día 18 ocurre algo singular: Mercurio y Júpiter entran directos, prácticamente a la vez.
¡Waw! Un momento decisivo, de gran orientación vital. Podemos sentirnos muy ubicadas y focalizadas, deseosas de volcarnos en alguna batalla personal, de la que esperamos mucho. Mercurio entrará directo en el grado 10 de Libra, y Júpiter, en el grado 22 de Acuario.
Este clima también es tremendamente intelectual, y favorece muchísimo el aprendizaje, los estudios, la escritura, la comunicación... de ahí que en torno al 18 de octubre pueda haber grandes noticias, no solo a nivel colectivo, sino también, a nivel personal, noticias de las que nos cambian el norte.
Luna Llena en Aries
Dando culminación a todo esto, el día 20 será la Luna Llena, nada menos que en Aries, en el grado 27. El clima de esos días es absolutamente épico, ingenioso, tal vez genial. También, potencialmente, ¡conflictivo!
En el momento de la Luna Llena tendremos a Marte, su planeta regente, en trígono a Júpiter y en cuadratura a Plutón. La cuadratura a Plutón será exacta, por cierto, hasta el día 23, cuando el Sol entrará en Escorpio.
Esto inclina a que, en torno a la Luna Llena en Aries, haya fuerzas, deseos e intenciones que colisionan entre sí, y que con Marte en Libra requerirán de un enfoque diplomático o de una negociación sosegada, pero también de asertividad para defender activamente lo que creemos justo.
Una Luna Llena en Aries involucrando con una T cuadrada a Marte y a Plutón tiene una tonalidad visceral, conflictiva, en la que diferentes deseos buscan afirmarse, y en la que termina afirmándose quien sea más poderosa, o más fuerte.
Son días delicados, en los que puede haber muchos cortes de situaciones, o realidades que reclamen agilidad en las reacciones, o una transformación inmediata de las formas.
Este es, de algún modo, un momento difícil para el balance que hemos tratado de construir desde septiembre. Puede ser un momento en que se rompan acuerdos, o en que haya una mayor desconfianza en lo común, y en que muchas personas decidan luchar solas por lo que les resulta mejor.
Teniendo en cuenta el clima astral que rodea a esta Luna Llena, es posible que salte a la luz la verdad de alguna cosa que cree frustración, impotencia o ira. Por suerte, el gran séxtil de Venus, Mercurio y Saturno atempera las ideas y la comunicación. Así que también tendremos de nuestra parte para gestionar todo ese movimiento de forma constructiva.
La temporada Escorpio
Viniendo de esta Luna Llena tan inflamable, el Sol entra en Escorpio el día 23, trayendo a la atmósfera un clima de cierta suspicacia, estrategia e investigación.
Tal vez, si en la Luna Llena tuvimos emociones muy intensas ante algún asunto, con la entrada del Sol en Escorpio veamos cómo esas emociones se hacen más densas y pesadas, o cómo se contraen en nuestro interior, se hacen un núcleo duro, y se transforman poco a poco en una poderosa voluntad de hacer algo, aunque aún esperando el momento adecuado.
Un momento adecuado que empezará a ubicarse desde que Marte entre en Escorpio el 30 de octubre, y que probablemente llegue en noviembre.
Los últimos días de octubre tendremos, de hecho, al Sol formando una cuadratura a Saturno, que será exacta entre el 29 y el 30 de octubre, y que puede hacernos sentir solas en nuestra emoción, presionadas por la realidad, o temerosas e inseguras. Puede haber cuestionamientos acerca de nuestra estructura de vida, acerca de los propósitos que hemos estado trabajando, o sobre nuestra habilidad para responder ante las demandas externas.
Pero, visto desde otro lado, también puede ser un momento de extraordinaria focalización en algo que es prioritario para nosotras sacar adelante, trabajando arduamente en dar forma a alguna cosa que habíamos esperado hacer durante mucho tiempo.
La llamada de Venus
En el mismo sentido, del 26 al 29 de octubre tendremos a Venus formando una cuadratura a Neptuno y un un séxtil a Júpiter, que presentan dinámicas más bien contrapuestas. Por un lado, la cuadratura de Venus y Neptuno trae un clima potencialmente derrotista, confuso, que posiblemente queramos encauzar hacia la evasión de dificultades, el entretenimiento, el consumo, el ensueño o la fantasía.
Por otro lado, el séxtil a Júpiter ofrece la posibilidad de abrir puertas, de rasgar las veladuras de las emociones difíciles y mirar las cosas desde arriba, analizando nuestra situación y encontrando motivos, cauces y oportunidades.
Venus, en estos aspectos, habla también de unos últimos días de octubre en los que anhelamos autocomplacencia, descanso y reparación.
También pueden ser días idóneos para hacer las paces si nos distanciamos de alguien o algo durante la Luna Llena. Son días de mayor empatía, generosidad y solidaridad, en los que veremos las emociones como un viaje. Tal vez laberíntico, pero muy conmovedor.
Potencialmente, con esos aspectos de finales de mes y la Luna menguando, podemos aprovechar para volver a preguntarnos cómo nos sentimos, qué necesitamos, qué nos hace sentir bien, y conectar con actividades, personas, espacios y placeres que nos nutran. La cuadratura del Sol y Saturno, que es un aspecto difícil, en realidad también podría ser un momento de tregua, en el que tal vez deseemos que el tiempo se detenga para poder mirar adentro.
Final de mes
Por último, octubre acaba como empezó, con Mercurio, ya directo, en trígono a Júpiter, coincidiendo con Hallowen y la Luna Menguante. A pesar del ajetreado bucle de experiencias que describimos dentro de esa simetría temporal que es octubre, esta vez lo terminamos con las ideas claras. Con algo aprendido. Más sabias.
En definitiva, si escogemos bien dónde merece la pena poner energía, y si nos escuchamos a nosotras mismas para tener presente que los estados emocionales y las oscilaciones de la motivación son transitorias, si mantenemos claras nuestras prioridades y nuestros límites personales, es posible que, con todo, este pueda ser un mes de mucho avance.
Un mes con distracciones en el que, en el fondo, tenemos la oportunidad de movilizar asuntos importantes.
Así que, ¿dónde estamos poniendo el foco? ¿Y dónde creemos que nos ayudaría más poner el foco, para vivir en armonía, y disfrutando?
Un abrazo grande, chichis!!!
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