¡Hola, chichis!!! ¿Vosotras también estáis en una de esas semanas memorables en las que todo se pone difícil de cohones? ¡No es para menos! Con casi todos los planetas retrógrados (exceptuando Marte y Venus), entre dos eclipses, y con los aspectos incendiarios de Marte y Mercurio en cuadratura a Urano, no es para menos. Y, de fondo, como una banda sonora llena de musicalidad y libertad (solo onírica), la cuadratura Júpiter Neptuno llamándonos a dar paseos por el mar, a soñar con largos viajes evasivos y soluciones mágicas que ayudan a sobrellevar las cosas pero no a ponerles solución. ¡Cuidado con justificar lo injustificable! El eclipse lunar del martes viene a señalar qué es lo que ya no puedes seguir postergando para deshacerte de lo que te daña.
Lo que más resuena estos días, y lo seguirá haciendo durante meses, es la oposición de los planetas que tocan los nodos lunares en Cáncer y Capricornio. Esta oposición fue la protagonista del eclipse solar del 2 de julio, y ahora lo volverá a ser con el eclipse lunar del 16 de julio. ¿Quién dijo que las temporadas entre eclipses fueran sencillas? ¡Todo se remueve! ¿De qué va este eclipse parcial de Luna que viviremos el martes?
En Cáncer tendremos a Venus uniéndose al Sol en conjunción con el Nodo Norte, una posición que el 14, 15 y 16 de julio nos pedirá cuidar de los que nos importan. Y, especialmente, retomar el contacto (ya que está Mercurio retrógrado) con aquellos de los que nos habíamos distanciado un poco. Es el momento de visitar a la abuelita, coger el teléfono para llamar a familiares y amigos que se han ido al extranjero, o de hacer una visita exprés a casa si somos nosotras las que nos habíamos ido. Habrá una cualidad suave y deseosa de abrazar, de ponerse al día, de apoyar y buscar apoyo, de cocinar juntas. De decir lo que tengas que decir a aquellas de tu confianza.

En general, un eclipse de Luna es una Luna llena más fuerte de lo normal; un punto crucial de toma de conciencia de lo que estaba oculto; un momento de claridad en el que vivimos la culminación de algo que iniciamos seis meses atrás. ¿En qué estábais en enero? Pero este eclipse no se queda ahí. Porque al estar la Luna en conjunción con Plutón, y tan cerquita de Saturno, el sabor de las cosas que saque a la luz va a hacer pupa. Va a remover todo lo plutoniano y saturnino de nuestro pasado que habíamos enterrado para no ver, y nos lo va a poner delante.
Recordaremos y viviremos malas experiencias con la autoridad, traumas que habíamos olvidado para protegernos psicológicamente, asuntos de dominio, de violencia, de muerte, de pérdida, de indefensión, de vulnerabilidad, y de mucho, mucho miedo. Al darse el eclipse entre Capricornio y Cáncer, trabes y recuerdos con figuras paternas y con asuntos familiares peliagudos van a tomar protagonismo. Especialmente, temas relacionados con el mundo patriarcal (Capricornio) asfixiándonos en lo personal van a salir a la luz, afectando brutalmente a nuestras emociones, a nuestro sentido de pertenencia y al núcleo familiar (Cáncer). Por ejemplo, un caso bastante probable para aquellas que tengáis el eclipse en una zona sensible de la carta será el de rupturas familiares al desvelarse secretos, cambios de carrera tras un hallazgo, abandono de parejas tiránicas, cosas así.
Y, añadido a esto, el eclipse va a dejarnos claro como el agua cuáles son nuestros bloqueos y limitaciones actuales, porque recordemos que Capricornio también rige los muros, las ambiciones, los límites, el tiempo, el esfuerzo... Con casi todos los planetas retrógrados, esta toma de conciencia va a ser bastante difícil, porque no vamos a saber cómo encontrar soluciones a los problemas apremiantes que toman forma ante nosotras.
El mejor consejo podría ser que ¡no esperes que todo se solucione de golpe! Con Marte y Mercurio en cuadratura a Urano vamos a tener ganas de dar soluciones drásticas a nuestros problemas. Pero no es el momento de actuar de forma drástica, porque los problemas que enfrentemos ahora tendrán seguramente unas raíces bastante contundentes, que requieren tiempo. Y planificación. Antes de gritar a los cuatro vientos que quieres ser libre, sé maquiavélica: piensa en frío cómo dar forma concreta a esa libertad que necesitas, y sigue los pasos sin enseñar todas tus cartas. Porque a lo que aquí nos enfrentamos es a la autoridad y al poder (patriarcal e institucional), y estos suelen tener recursos para atraparte en sus redes. Ya sabes, en martes, ni te cases ni te embarques 😉. Pero mira al horizonte.

Como ya os conté cuando hablé del eclipse de sol del 2 de Julio, la oposición Cáncer Capricornio es una oportunidad crucial para reestructurar los dominios del patriarcado y reclamar nuestros derechos. En ese sentido, los efectos de este eclipse lunar se suman a una serie de factores que estarán activos hasta 2024, cuando Plutón abandone Capricornio.
Si este eclipse te afecta de forma personal y descubres que la violencia patriarcal del sistema ya te resulta intolerable, únete a las demás, chichi, porque estamos todas en el mismo barco, y todo lo personal que nos sacuda es y seguirá siendo político. Nunca te faltarán apoyos. El Sol y Venus en Cáncer te recuerdan que habrá entornos de hermanas que te crean y te ayuden a ser libre.
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